sábado, 28 de abril de 2012

Dracula de Bram Stoker (1993)



¿Drácula de Bram Stoker o de Francis Ford Coppola?  Os preguntaréis a qué viene esta pregunta. La respuesta es sencilla: repasando las reseñas aparecidas en diversas revistas especializadas, con motivo de su estreno, y artículos de opinión encontrados en internet, todos, en mayor o menor medida, dedican un espacio a hablar sobre la fidelidad de la película con respecto a la novela de Bram Stoker. Claro, la confusión o no, viene dada por la inclusión en el título al autor de la novela, Bram Stoker. A partir de ahí, los más fans de este personaje y, sobre todo, los  de la novela, van al cine con la pretensión de verla en imágenes y si no se  corresponde, la desilusión está servida. En este sentido, tengo que reconocer que me da exactamente lo mismo si es fiel o no a la obra literaria original.

Las razones son varias: en primer lugar considero que son lenguajes totalmente diferentes: el cine y la literatura. Cada uno con sus características propias, por lo tanto, desde este punto de vista ¿a que consideramos fiel? ¿Calcar la estructura de la novela?, ¿los personajes?, ¿el espíritu?… En el caso del Drácula de Coppola, diversos autores opinan que es fiel en cuanto al desarrollo de la trama asumiendo incluso la estructura epistolar de la obra de Stoker (no sólo en parte). En cambio “traiciona” el espíritu ya que la historia de amor, eje de la película, no aparece en el libro.
Por otro lado son autores diferentes: Stoker y Coppola. Partimos de la base de que el personaje, Drácula, es sumamente conocido. Todas sabemos quien es y aunque, no hallamos leído el libro, de seguro hemos visto versiones anteriores en el cine y esto nos va a  condiciona nuestra opinión y, sobre todo, nuestro imaginario de quien o que representa Drácula.  Por ello tendremos nuestra opinión al respecto sobre que Drácula es el más creíble. Considero que cada director debe ser fiel así mismo y presentarnos el personaje y la historia que nos quiera contar como el quiera, independiente de la novela en que se basa. Unos se atendrá escrupulosamente a la misma y otros nos presentarán el personaje tomando del mismo aquellos rasgos o situaciones que más les interese.

¿Qué podemos decir del Drácula de Coppola?  El guión es de James V. Hart. Este llevaba trece años intentando convertirlo en película. Fue la protagonista femenina, Winona Ryder, quien entrego el mismo a Coppola. A este le gustó y decidió llevarlo a la pantalla. Por ello es una película de encargo en la que Coppola quiso ver una manera de una recuperación económica de sus estudios, diezmadas tras el fracaso comercial de su anterior película, Corazonada.
En el guión de Hart podemos encontrar  elementos de otras versiones cinematográficas: el expresionismo de Murnau, el goticismo de la universal y la violencia y el erotismo de la Hammer. Además, introduce un magnífico prólogo, con influencias del “Kagemusha” de Akira Kurosawa, donde se vincula a Drácula con el personaje de Vlad el Empalador, príncipe de Valaquia.
¿Cuál son los planteamientos de Coppola?  Está rodada íntegramente en estudio se cree que para ahorrar costes económicos.  La mayor baza es el aspecto visual con toda una serie de efectos: aparatosos movimientos de cámara, sobreimpresiones, secuencias realizadas con sombras que dan forma a una estética muy marcada creando un ambiente muy especial. Destacar asimismo, el vestuario de Eiko Ishioka que contribuye a resaltar la brillantez visual del film.

En cuanto a la temática de la misma, nos cuenta, por un lado, la historia de amor de Drácula y Mina. Una historia que transita por el tiempo y por el espacio en buscar de la mujer que perdió, Elisabetta y que vuelve a encontrar en el doble o reencarnación de esta en  Mina, en la Inglaterra  victoriana.. Reencarnación ya que es la misma actriz, Winona Ryder, quien encarna a ambos personajes con lo que es posible esta lectura. Romanticismo a raudales ya que es el amor quien derrime a Drácula y consigue así la paz de su alma atormentada. Historia que, sin embargo chirría en algunos momentos y es contradictoria en la visión que se nos tramite del personaje ya que vemos a un enamorado Drácula que corteja a Mina y, al mismo tiempo se nos presenta como un sádico vampiro en la magnífica escena de la violación y vampirización de Lucy (mejor amiga de Mina.)

Hay otros temas apenas apuntados: La inmortalidad o la interpretación sexual del mito vampírico, en este caso, por exigencias del productor que veía como era clasificada X la película; tuvieron que dulcificarla para eludir esta clasificación.
Destacar el magnífico reparto, donde un Gary Oldman inmenso y casi sobrenatural realiza una de las mejores interpretaciones masculinas del cine de los noventa. Destacar igualmente los trabajos de Winona Ryder y Anthony Hopkins en el papel del cazavampiros Van Helsing.

En conclusión, no estamos ante un gran film pero tiene suficientes puntos de interés resuelta con mayor habilidad que inteligencia. Punto de partida de resurgir de las películas de Vampiros: al año siguiente se estrenaba “Entrevista con el Vampiro” basada en una novela de Anne Rice y de las serie y películas para adolescentes actuales.

FICHA TÉCNICA

TÍTULO ORIGINAL:  Bram Stoker´s Dracula
DIRECTOR:  Francis Ford Coppola
GUIÓN:  James V. Hart
PRODUCCIÓN:  American  Zoetrope/ Osiria films para Columbia Pictures, 1993
MONTAJE:   Nicholas Smith, Glen Scantlebury y Anne Goursaud
FOTOGRAFÍA:  Michael Ballhaus
MÚSICA:   Wojciech Kilar
REPARTO: Gary Oldman, Winona Ryder, Anthony Hopkins
DURACCIÓN:  120 minutos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario